sábado, 26 de enero de 2008

PREGUNTANDO A SADI

150 interinos que se turnan para encerrarse en la catedral de Sevilla. En Málaga, otro interino permanece 38 días en huelga de hambre. Los interinos andaluces están en pie de guerra. Y es que 2.500 de ellos se han quedado sin plaza, sobre todo de las especialidades de Música y Educación Física. Antes la Junta les llamaba cuando necesitaba maestros de Primaria. Pero ahora la LOE ha creado una bolsa específica de Primaria, dejando fuera a estos profesores. José Luis Ramos, portavoz del Sindicato Andaluz de Interinos (SADI) nos da su visión sobre la problemática de los interinos en esta comunidad autónoma.Encierros de interinos, huelga de hambre... ¿Es un problema global el de los interinos o un problema andaluz?Es un problema global, ya que hay 80.000 interinos en toda España, pero existen 20.000 en Andalucía (el 25% de esa cifra), al menos hasta el año pasado (en la actualidad somos unos 15.000). Además, aquí existe un importante grado de cohesión de nuestro colectivo, algo que quizá no se produzca en las demás comunidades, aunque el problema es común.Más del 80% de aprobados en las pasadas oposiciones han sido interinos. ¿Qué te parece esta cifra?En principio es una buena noticia, teniendo en cuenta que en Andalucía la cifra de aprobados interinos ha rondado siempre el 40%. Pero hay que esperar a ver el resultado de las oposiciones de Secundaria, para comprobar que van en la misma línea.¿Piensas que la transitoria puede reducir la precariedad laboral?En el caso de Andalucía sí, ya que aquí tradicionalmente las cifras de profesorado interino que consolidaban su plaza eran muy bajas. Evidentemente, la transitoria ha producido el doble de porcentaje de aprobados interinos.¿El informe que sustituye a la “encerrona” ha ayudado a los interinos de algunas CCAA más que a los de otras?El informe es una idea que salió del PSOE-A y que, como ha sido una potestad que se ha dejado en manos de las CCAA, ha habido otras, sobre todo en las que gobierna el PP, que lo han denegado para sus propios trabajadores. Creo que es una cuestión política la que gravita, y la idea de torpedear algo que ha hecho el partido contrario.¿Estáis entonces contentos con la Consejería andaluza?Es lo que le tocaba por varias razones. La primera porque el principal problema de interinos está en Andalucía. Aquí hemos rozado el 20% de la plantilla hasta el año pasado. Además, es un porcentaje que ella misma ha creado, ya que en el momento en que se implantó la Logse, en lugar de consolidar puestos de trabajo (por aquello del bajo coste económico y la movilidad, que en Andalucía es muy alta), se prefirió echar mano de interinos. La Administración andaluza tenía una deuda moral con nosotros.¿Supone la Ley de Educación Andaluza una esperanza?En su elaboración hicimos una serie de enmiendas con idea de que la propia Junta recogiera soluciones para los interinos: laboralización, estabilidad por acuerdo o pactos, asegurar la colocación por tiempo de servicio… Pero ninguna de esas enmiendas se ha llevado a efecto, por lo que la LEA se ha olvidado de los interinos en Andalucía.La consejera, Cándida Martínez, abandona Educación para encabezar la lista al Congreso por Granada. ¿Qué evaluación realiza SADI de su actuación durante casi ocho años?Si realizamos una visión global desde que llegó hasta que se ha ido, yo personalmente le pondría un suspenso, ya que todos los problemas de interinos que han existido a nivel legislativo y sindical los ha generado ella. Para afrontar la Logse, que en Andalucía tenía un coste económico muy alto, se prefirió echar mano de interinos. Pero también hay que reconocer que en su última etapa parece que ha iniciado un caminito pequeño y con muchas dudas conducente al arreglo del desaguisado que ella misma ha producido, pero esto vamos a ponerlo en cuarentena.¿Qué le pediríais al que ocupe su puesto?Que exista un porcentaje lógico de interinos, ya que evidentemente hay que cubrir bajas y enfermedades, pero que luche por otra solución, y no por martillear continuamente al interino con un concurso-oposición memorístico con muy pocas posibilidades de afrontarlo, sobre todo para aquellos que acumulan mucho tiempo de servicio y cuentan con unas cargas familiares lógicas por la edad. Pido valentía política para hacer efectivo el dictamen Ariño u otra solución similar.¿Qué piensas del último borrador del Estatuto Docente?Nos llamó la atención que cuando se refería a la carrera docente, que se ordena en grados, al interino siempre le tocaba el último grado del escalafón, independientemente de que fuera acumulando más o menos tiempo, de los méritos, de los cursos de formación, lo que nos parece tremendamente injusto. El interino debe estar en el mismo grado que el compañero funcionario una vez que acumule los mismos méritos.¿Cuál es tu opinión acerca de que el MEC pretenda cambiar los temarios de oposición?El 6 de septiembre de 2006 todos los sindicatos andaluces firmaron el acuerdo por el que la Consejería llevó al MEC una serie de propuestas con objeto de fabricar la transitoria y el RD de acceso. Precisamente uno de los puntos que recogía dicho acuerdo es que había que racionalizar los temarios. Que esa idea tenga un resultado final no sólo de cambio de los que ya existen, sino que también se amplíen, nos parece una noticia muy negativa. Los interinos van a ser los primeros perjudicados, ya que somos un colectivo con escaso tiempo para afrontarlos.¿Contáis con el apoyo de otros sindicatos en vuestras reivindicaciones?Los sindicatos tradicionales siempre han defendido, en primer lugar, al trabajador funcionario, pero también al personal que aún no era trabajador (algo que nunca hemos entendido), es decir, a los opositores libres. Con éstos no queremos tampoco guerra ni oposición, ya que yo también lo he sido. Pero es a los interinos a los que teóricamente debían defender.¿Crees que hay alguna posibilidad de reducir la cifra de interinidad al 8%?No me cabe duda de que cuando una administración quiera reducir la cifra y ponga todo su empeño, lo va a conseguir. La solución está muy clara: sacar plazas. Pero esas plazas tienen que ser ocupadas por todos aquellos a quienes legítimamente les corresponde, los que cuentan con un tiempo de trabajo consolidado, lo cual no significa que se cierren las puertas a las demás personas, que tienen todo su derecho.
La transitoria
¿Ventajas?“Las partes de la prueba no son eliminatorias entre sí, por lo que es más fácil llegar a la fase de oposición. También supone una ventaja la aparición del informe que sustituye la unidad didáctica para los interinos que estén en activo en el momento de la convocatoria. Además, la experiencia docente se valora en mayor grado. Podemos acumular hasta siete puntos de los diez que tiene la fase de concurso”.¿Defectos?“Hay que aprobar la fase de oposición para que se baremen los méritos. Son, además, oposiciones demasiado memorísticas que premian la capacidad de almacenar conceptos más que la experiencia docente”.¿Alternativas?“Hace unos años encomendamos a un famoso bufete de abogados de Madrid, Rafael Ariño, la elaboración de un dictamen jurídico que dibujara una solución gradual. Alcanzado un determinado tiempo de servicio, se accedía a la función pública”.¿Repercusión del informe Ariño?“Muchísima. En ningún caso se ha desechado por cuestiones jurídicas, sino porque parece ser que abre un debate enorme y un hueco en la función pública en cuanto a nuevas figuras que deben crearse”.¿Exámenes tipo test?“La valoración de la prueba de la fase de oposición le corresponde a un tribunal, por lo que es una valoración enormemente subjetiva. Una prueba tipo test es algo más complicado, pero mucho más justo”............ENTREVISTA A JOSE LUIS RAMOS , PORTAVOZ DE SADI , EN MAGISNET , ENLACE EN LA COLUMNA DE LA DERECHA .

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